Los tirados a la basura....

Y se te encoge el alma cuando entras intentándo prepararte para que nada sea duro, para que nada te rompa el corazón, para que lo visto no te desgarre tanto como para que no puedas dejar de llorar... pero no hay nada que hacer. Ellos fueron dejados allí para ser custodiados por los ángeles. Aquellos que escondieron entre sus ropas a tantos de ellos y sus "mamás", los que les daban calor por la noche y calmaban su llanto y su hambre... en medio del sonido aterrador de disparos, y gritos de aquellas a quienes forzaron.
Tirados a la basura por defecto, por sindrome de Dawn, por vizcos... y ya no sólo por miseria.
Nada te consuela, a ti, que vives bien, que nada te falta, que no sientes la ausencia de quienes te dieron la vida... y no entiendes, y no puedes entender, y te niegas a entender... 57 razones para seguir, tirados por los suelos, derrochando infancia y esperando sobrevivir. Los tirados a la basura no ven el regreso de sus padres, no vuelven a por ellos, tan sólo les queda crecer dentro o salir a los tres años a saber dónde... y tan sólo puedes llorar...